Me despido del día , dandole una bienvenida a la sola noche semanal .
La noche fria y sucia, el quieto mar oscuro me hace pensar en mounstros marinos listos para comer carne fria, pienso en mi muerte, en mi muerte silenciosa y conciente. Cierro lo ojos en las rocas punzantes la brisa me golpea suavemente, pienso en mis días de té, en mis noches de soledad y mis mañanas murientes. Nada retiene mi partida , nada me retiene.
15 minutos de muerta en vida, salgo de mi estado forzoso, salgo y vuelvo a la ciudad, calles solitarias viento violento y basureros descompuestos. Llego a mi pieza me acuesto recuerdo el mar , duermo para comenzar otro día lleno de VIDA .